Ayer en clase les hablaba a un grupo de alumnos de sacarnos la mochila de la “perfección” de la espalda. Olvidarnos por un momento de la foto de referencia a la que miramos para dibujar. Cambiemos el foco, movamos la vara y ubiquemos el objetivo en el sentimiento, la sensación que nos causa ese dibujo.
Suena fácil pero no lo es. Muchos nos ponemos a competir con una foto, lo que en mi opinión es un error ya que esta siempre gana.
En cierto momento en el desarrollo como dibujante me parece correcto incluso importante competir con la foto, es la zanahoria, el lugar al que nunca vamos a llegar pero nos va a ayudar a subir de nivel.
Luego de cierto tiempo un objetivo más ambicioso puede ser superar la foto! Crear más de lo que nos ofrece la imagen...
"Muchos nos ponemos a competir con la foto...esta siempre gana."
El día que yo entendí que podía no solo ganarle a la foto sino ir mas allá de ella, logrando hacer un dibujo “sentido” (como el titulo de este comentario) o un dibujo que signifique algo para mi o para otro, lo haga pensar o le cause alguna sensación, me saqué una mochila bien pesada de la espalda y abrí un mundo de posibilidades.
Se trata de aceptar errores, defectos e imprecisiones y esto puede no ser fácil.
Repito, me llevo mucho tiempo llegar a estas conclusiones y amigarme con la idea de que hay algo más allá, pero les recomiendo que piensen un poco este punto porque puede ser un antes y un después.